martes, 16 de febrero de 2016

El roble en la tracición celta. Este árbol es considerado por los celtas como un almacén de la sabiduría encarnada en su fuerza imponente. Los celtas observaron el crecimiento masivo de la encina y el espacio impresionante que ocupaba, por lo cual lo tomaron como una señal que debía ser honrado por su resistencia y noble presencia.
De hecho las hojas de roble representaban un signo de estatus especial entre los celtas (así como también para los antiguos griegos y romanos).
Los Druidas llamaban al roble con el nombre “Duir”, cuya traducción es “puerta” y la tradición indica que los celtas espiritualmente avanzados, a través de este mágico árbol, tendrían acceso a los planos etéreos de pensamiento superior que encontraba su puerta de acceso en el roble.
Su atracción a los rayos, su tamaño y longevidad hacen del roble un poderoso símbolo de la vida. El roble representa en sí una leyenda viva que hace referencia a todo lo que es verdad, sano, estable y noble.


Lak´es a la kim

No hay comentarios:

Publicar un comentario